Este libro analiza críticamente las prácticas habituales en la enseñanza de las ciencias sociales en el nivel inicial, cuestionando los “trabajitos” mecánicos que no desarrollan pensamiento ni comprensión. Lila Ana Ferro propone enfoques más significativos, donde el trabajo docente se centra en investigar, preguntar, observar y construir sentido con los niños. Con una mirada pedagógica sólida, la autora invita a repensar la función del jardín como espacio formativo y no solo reproductivo. Ofrece criterios, ejemplos y fundamentos teóricos para mejorar la planificación. Ideal para docentes, formadores y estudiantes que buscan transformar sus prácticas en educación inicial desde una perspectiva crítica y actual.

