En Los hijos y los límites, Jaime Barylko reflexiona sobre la importancia de establecer normas claras en la crianza para evitar el vacío emocional en los niños. Critica la tendencia a la permisividad excesiva, que confunde libertad con caos, y destaca que los límites son esenciales para el desarrollo de la identidad y la convivencia. El autor aboga por una educación basada en el compromiso y el respeto mutuo, donde los padres asumen su rol sin delegar responsabilidades.